China expulsa a nueve generales del Ejército por “deslealtad”
Beijing, 17 de octubre de 2025 —
El gobierno chino anunció la expulsión de nueve altos oficiales del Ejército Popular de Liberación (EPL) por motivos de “deslealtad” y “violaciones graves de disciplina política”. La decisión, emitida por la Comisión Militar Central, refuerza el control de Xi Jinping sobre las fuerzas armadas y coincide con la antesala del Cuarto Pleno del Partido Comunista, donde se revisarán las directrices estratégicas de defensa nacional.
Claves rápidas
- Nueve generales del EPL fueron destituidos por “deslealtad” al Partido.
- Varios pertenecían a la Fuerza de Cohetes, encargada del arsenal nuclear.
- La medida consolida el poder de Xi Jinping en vísperas del Cuarto Pleno.
- Se enmarca en la campaña anticorrupción y de lealtad ideológica iniciada en 2012.
Purga en la Fuerza de Cohetes
Entre los oficiales expulsados figuran antiguos comandantes y comisarios políticos de la Fuerza de Cohetes, la unidad más sensible del EPL por su papel en el control de misiles estratégicos y nucleares.
Fuentes del diario South China Morning Post señalan que las investigaciones comenzaron meses atrás, tras detectar irregularidades en contratos y designaciones internas.
Esta depuración se suma a otras destituciones recientes en los sectores de defensa aeroespacial y logística, que apuntan a fortalecer la cadena de mando directamente vinculada con Xi Jinping.
Desde que asumió el liderazgo en 2012, Xi ha promovido una reestructuración total del aparato militar, con el objetivo de “asegurar la lealtad absoluta del ejército al Partido Comunista”. Más de 100 altos mandos han sido investigados o sancionados en los últimos años, en una de las campañas internas más amplias en la historia moderna del país.
Contexto político y estratégico
El momento elegido para la expulsión no es casual. En noviembre se celebrará el Cuarto Pleno del Comité Central, reunión clave en la que se revisarán los avances de la política de modernización militar y las tensiones crecientes con Washington y Taipéi.
Expertos interpretan la purga como una señal de advertencia interna: en un contexto de rivalidad global, la disciplina ideológica se coloca por encima de los méritos técnicos.
El EPL, que aspira a completar su modernización para 2027, se enfrenta a una compleja transición tecnológica. La combinación de presión internacional, vigilancia interna y renovación doctrinal busca evitar filtraciones o fracturas en la cúpula militar, garantizando una línea política uniforme.
Control, lealtad y modernización
La estrategia militar de China prioriza el desarrollo de capacidades autónomas, la inteligencia artificial y la ciberdefensa.
Sin embargo, el discurso oficial subraya que el avance técnico debe ir acompañado de fidelidad política.
Los medios estatales remarcan que “sin pureza ideológica no puede haber fuerza militar confiable”, reforzando la narrativa de un ejército “rojo y fuerte”, dependiente directamente del liderazgo central.
De acuerdo con datos del Ministerio de Defensa, la actual fase de reformas contempla la reorganización de mandos regionales y la digitalización de la logística de combate, una modernización que avanza en paralelo a la purga institucional.
Dato cultural / lingüístico
En chino, la palabra 忠诚 (zhōngchéng) significa “lealtad” o “fidelidad”.
En el contexto político, la expresión 忠诚于党 (zhōngchéng yú dǎng) —“lealtad al Partido”— resume la relación histórica entre el EPL y el Partido Comunista, donde la obediencia ideológica es considerada una virtud moral y patriótica.
中国军队必须绝对忠诚于党。
Zhōngguó jūnduì bìxū juéduì zhōngchéng yú dǎng.
“El ejército chino debe ser absolutamente leal al Partido.”
Publicado por Redacción Hanyu — octubre 2025
Sección: Política y Defensa